Gavilán
Un Apellido Asturiano de Origen Vaqueiro
El apellido Gavilán es un nombre con raíces profundas en la tradición asturiana, específicamente en el grupo conocido como los «vaqueiros.» A lo largo de los años, esta familia ha probado su hidalguía, lo que sugiere un linaje de respeto y prestigio en la región. A pesar de su antigüedad, las armas que una vez pudieron haber representado a los Gavilán hoy son un misterio, ya que han caído en el olvido.
Gavilán: Una Cumbre en la Sierra del Puelo
Además de su conexión como apellido, Gavilán también es el nombre de una cumbre que se eleva a 634 metros sobre el nivel del mar en la sierra del Puelo, ubicada en los concejos de Cangas del Narcea y Tineo. Esta cumbre se encuentra rodeada de hermosos viñedos y coloridas xiniestas, lo que la convierte en un lugar de gran belleza natural. Para llegar a la cumbre de Gavilán, se puede partir desde Santa Icia, en el kilómetro 29 de la carretera La Espina-Cangas del Narcea, lo que ofrece a los excursionistas la oportunidad de disfrutar de vistas espectaculares.
Gavilán: Una Peña con Vistas Panorámicas en Caso
Otro lugar que lleva el nombre de Gavilán es una peña que se alza a 1.416 metros en el concejo de Caso. Esta peña ofrece vistas panorámicas impresionantes de la abrupta garganta del río Monasterio en dirección sureste. Para llegar a esta elevada percha de observación, se puede tomar la senda desde el pueblo de Soto, siguiendo la carretera Laviana-Tarna, pasando por la majada de Pedrosín, las «pandas» de Llen de la Gobia, el arroyo Vallines y el «chozo» de El Gavilán. Este viaje panorámico recompensa a los aventureros con vistas que quitan el aliento y la oportunidad de explorar la belleza natural de la región.
En resumen, el apellido Gavilán tiene profundas raíces en la tradición asturiana y es parte de la historia y el paisaje de la región. Tanto como un apellido como en referencia a cumbres y peñas, el nombre Gavilán evoca una conexión con la belleza natural y la herencia asturiana.
Conocer Asturias
«Una vez finalizada la fermentación, la sidra se embotella sin filtrar, conservando su carácter natural y su ligera efervescencia. Es importante destacar que la sidra asturiana tiene un sabor único y ligeramente ácido, con notas frutales y un ligero toque amargo. Esta combinación de sabores la hace muy versátil a la hora de maridar con una amplia variedad de platos, desde quesos y embutidos hasta pescados y mariscos.»